GSK - Con VIH sin Sida

Introducción:

Gracias a los avances en el tratamiento antirretroviral y el diagnóstico a tiempo, las personas que viven con VIH tienen una mayor esperanza de vida,¹ esto significa que han aumentado los años de vida de las personas con esta enfermedad^1,2 y además tienen una mejor calidad de la misma.¹

Vivir con VIH trae asociado otros problemas que afectan el bienestar de las personas.¹ El estigma y la discriminación producen un efecto negativo sobre la realización de pruebas para conocer el estado con respecto al VIH y sobre el cumplimiento del tratamiento, lo que afecta negativamente la calidad de vida y de salud.¹

Algunos países aún tienen mucho trabajo por delante para cumplir los objetivos 95-95-95 propuestos por la ONUSIDA para el año 2020, donde se propone que el 95% de las personas conozcan su estado con respecto al diagnóstico de VIH, el 95% de las personas diagnosticadas reciban efectivamente su tratamiento para la enfermedad y el 95% de las mismas alcance un estado de supresión viral.¹

Incorporar las opiniones y experiencias al actualizar las políticas y la prestación de servicios de salud es importante para lograr un envejecimiento saludable y una calidad de vida óptima para las personas viviendo con VIH.¹ El estudio Positive Perspectives se creó para conocer las necesidades no cubiertas de las personas que viven con VIH.¹

Evolución de la epidemia:

Los primeros casos de SIDA se reportaron en Estados Unidos en 1982. Actualmente 36.9 millones en el mundo viven con el Virus de Inmunodeficiencia Humana; en 1 año se infectan 1.8 millones y casi 1 millón muere a causa del virus. Este virus es uno de los más estudiados de la historia y los mayores avances corresponden a la terapia antirretroviral. En 1987 se demostró que una sola droga, conocida como Zidovudina o AZT, era capaz de suprimir parcialmente y de manera temporal la reproducción del virus. Actualmente, la vida de las personas que viven con VIH cambió desde que existen más de 30 drogas antirretrovirales, que, administradas en combinación de 2 drogas o más, incluso algunas en un solo comprimido, logran suprimir el virus a niveles indetectables.³

Niveles de virus indetectable es igual a virus intrasmisible, es decir tener un nivel tan bajo de virus en la sangre que los exámenes de laboratorio no logren detectarlo; esto evita la transmisión del virus mediante las relaciones sexuales.¹

Los trastornos graves del estado de ánimo afectan frecuentemente a las personas con VIH, muchas veces pueden incluso llegar a dificultar el cumplimiento del tratamiento antirretroviral tal como lo ha indicado el médico. Además, disminuyen el nivel de salud y la calidad de vida de las personas. Las personas con VIH con trastornos leves del estado de ánimo y que además consumen sustancias ilícitas, están en mayor riesgo de desarrollar a largo plazo trastornos mentales más graves.¹

¿Cómo se realizó el estudio Positive Perspectives?:

El estudio Positive Perspectives es un estudio internacional sobre las personas que viven con VIH y están recibiendo su tratamiento antirretroviral. El primero se realizó en el año 2017 y consistió en una encuesta realizada a 1.111 personas, provenientes de 9 países. Posteriormente, en el año 2019 y basados en esta información se llevó a cabo el estudio Positive Perspectives 2, con la participación de 2.389 personas provenientes de 25 países del mundo.^1,4

Estos estudios tuvieron como objetivo conocer las opiniones y experiencias de los pacientes, en cuanto a las necesidades no cubiertas, el tratamiento antirretroviral y el impacto del mismo y del virus en sus vidas, la visión del futuro y las relaciones con el sistema de salud.^1,4

Los resultados ponen en evidencia que la calidad de salud de las personas viviendo con VIH es sub-óptima, y aumenta la importancia de que los servicios de salud donde se atienden, tienen el deber en desarrollar un enfoque integral de atención abordando la calidad de vida, mejorando la comunicación entre los profesionales de la salud y los pacientes; luchando contra los efectos negativos del estigma y la discriminación, y desarrollando estrategias destinadas a resolver los problemas que enfrentan las personas que viven con esta enfermedad.^1,4

Calidad de vida y resultados de salud: es importante mejorar el diálogo con el personal de salud para mejorar su calidad de vida. El personal médico debe otorgar información de que, una vez que la carga viral se vuelva indetectable, no se puede transmitir el virus por vía sexual; esto disminuye el estigma y el miedo de las personas que viven con VIH.^1,4

Comunicación, información y toma de decisiones compartidas: Los mejores resultados en cuanto a salud se obtienen cuando las personas con VIH pueden participar en la toma de decisiones sobre tratamientos, atención médica y creación o revisión de políticas y programas que afectan directamente su atención.^1,4

Estigma y discriminación: las personas con esta enfermedad se enfrentan a grandes problemas de actitudes y opiniones negativas sobre su condición (estigma), y a diferentes tratos debido a su estado con respecto al VIH (discriminación). Esto se traduce en una mayor transmisión del virus y una peor calidad de vida. Incluso, muchas personas viviendo con VIH han tenido que ocultar o camuflar sus medicamentos para no revelar su estado.^1,4

Envejecer con VIH: el estudio demostró que las personas con VIH también tienen que enfrentarse a muchas enfermedades relacionadas que los afectan a largo plazo, es decir, crónicas. Entre las enfermedades más frecuentes se encuentran la hipertensión, el colesterol alto, trastornos del sueño y mentales.^1,4

Calidad de vida: tener un nivel de virus en sangre indetectable es igual a virus intransmisible. Este debe ser un mensaje que llegue a todas las personas con VIH y sus comunidades.¹

Comunicación e información: es importante que el diálogo entre el médico y las personas con VIH sea horizontal, abierto, fluido y transparente. Además, las personas con VIH y los grupos comunitarios deben ser partícipes de las políticas y en la toma de decisiones en las unidades de atención médica.^1,4

Desestigmatizar: los profesionales de la salud y los proveedores de atención médica deben colaborar en la reducción del estigma y discriminación, para así disminuir la transmisión. Los legisladores deben aprobar leyes que protejan el acceso a los servicios, trabajo, educación o viajes para disminuir la discriminación y la vulnerabilidad de los derechos humanos.¹

Envejecimiento con VIH: Las personas con VIH deben ser incluidas por los profesionales de la salud en la creación de planes de atención personalizados.¹

Perspectivas de personas viviendo con VIH

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Desafíos:

Recomendaciones: